Washington Irving
(1783 – 1859)
¿Qué milagro mayor que el propio Corán, un libro revelado por medio de un hombre iletrado; tan elevado en lenguaje, tan incontrovertible en argumento, que la habilidad unida de los hombres y los demonios no podría componer nada comparable? ¿Qué mayor prueba podría haber de que vino de nadie más que de Dios mismo? El Corán mismo es un milagro.
Washington Irving,(The life of Muhammad) "La vida de Mohamed", libro, capítulo 9, p. 49