1. Jesús (que la paz de Allah sea con él): Los musulmanes creen que Jesús fue un Profeta y Mensajero de Allah, nacido de la Virgen María (Mariam en árabe) a través de un nacimiento milagroso, sin padre, pero por orden directa de Allah “Se". Es muy respetado y amado por los musulmanes. Realizó milagros por voluntad y permiso de Allah y entregó el mensaje de adorar sólo a Allah. Los musulmanes no creen que Jesús fuera el hijo divino de Allâh ni parte de una Trinidad, como se cree comúnmente en el cristianismo.
2. Muhammad (que la paz y las bendiciones de Allah sean con él): Muhammad es considerado el último Profeta y Mensajero del Islam. Recibió el Corán, el libro sagrado del Islam, a través de revelaciones durante un período de 23 años. Es venerado como el "Sello de los Profetas" y el ejemplo de una vida justa y moral. Sus enseñanzas y acciones forman la base de la fe y la práctica islámicas.
En conclusión, comparar a los dos no es una cuestión de quién es "mejor", sino más bien un reconocimiento de sus respectivos roles en la transmisión del Plan de Allah para la humanidad. Los musulmanes creen en la profecía tanto de Jesús como de Muhammad y los tienen en alta estima. La elección entre ellos no es una cuestión de superioridad sino un reconocimiento de la progresión de la profecía a lo largo de la historia, siendo Muhammad el Mensajero Final de Allah que trajo la guía completa y definitiva para toda la humanidad.